Al equipo no le hicieron goles en Estados Unidos, recuperó muchas pelotas en ataque y mostró su idea de profundizar rápido.
Después del regreso de Miami, River volvió a trabajar en el RiverCamp de Ezeiza y encarará la última semana de trabajo antes de empezar el campeonato con mucho optimismo. Es que el cuerpo técnico comandado por Martín Demichelis quedó muy conforme con la primera pretemporada al frente del equipo de Núñez y el balance es positivo.
Las principales conclusiones están a la vista y tienen que ver con lo que el equipo demostró futbolísticamente en los tres amistosos que jugó en tierras norteamericanas. Fueron tres triunfos (1-0 a Rayados de Monterrey; 2-0 a Millonarios y 3-0 a Vasco da Gama) y no recibió goles, algo en lo que el nuevo cuerpo técnico tratará de hacer hincapié.
Pero más allá de los resultados, se vieron cuestiones de juego que responder a lo que pretende Demichelis, como la presión de tres cuartos de cancha hacia adelante, lo que provocó que River iniciara muchos ataques ya en una posición avanzada por la recuperación de la pelota cerca del área rival, lo que originó varias chances y poder de gol con ataques rápidos, sin tanta posesión. Y también hubo un buen aprovechamiento de las pelotas paradas.
La tenencia de la pelota, de todos modos, es otra característica que Demichelis quiere impregnarle al equipo y en varios pasajes de los amistosos se vio ese control del balón. Pero el técnico no busca una posesión “aburrida”, sino que sea útil para profundizar los ataques.
Y a la hora de manejar la pelota es clave Ignacio Fernández. Su vuelta y la manera en la que se encuentra tanto técnica como físicamente es otro saldo a favor que le dio el trabajo en Estados Unidos a River.
Y si se hace referencia a nombres propios, también hay que destacar que Franco Armani volvió en estado de gracia luego de ser campeón del mundo y sigue siendo garantía, que Jonatan Maidana se está recuperando, que Emanuel Mammana empieza a ser el nuevo líder de la defensa, que Bruno Zuculini puede cuidarle las espaldas a Enzo Pérez, que José Paradela volvió a tomar confianza, que Miguel Borja sigue convirtiendo y que Lucas Beltrán, cuando entró, también respondió con goles.
En tanto, una de las cuestiones que más se celebró fue la grata aparición de Franco Alfonso, un juvenil de 20 años que mostró un juego interesante a partir de su guapeza para encarar y la frescura para desenvolverse en la cancha. Lo mismo para el colombiano Flabián Londoño, quien también tuvo sus minutos.
Mientras, entre los asuntos a resolver queda pendiente el funcionamiento defensivo, que tendrá que reforzar sobre todo en el retroceso del equipo y, por otro lado, la recuperación de los jugadores lesionados que no pudieron realizar con normalidad la pretemporada, como son los casos de Matías Suárez, Nicolás De La Cruz, David Martínez, Paulo Díaz y Agustín Palavecino. Aunque, los que estaban bien pudieron culminar el trabajo sin problemas.
“Fuimos de menor a mayor a lo largo de la pretemporada. Me quedo muy contento que de los chicos que estaban saludables, no perdimos a ninguno. Además, tuve la posibilidad de darle minutos a todos y los que van entrando desde el inicio o desde el banco le van encontrando la vuelta al partido, al mecanismo, a la idea”, afirmó Demichelis.