Hoy a la tarde se retomaban las negociaciones en el ministerio de Trabajo.
Cuando se esperaba una nueva reunión de las partes en el ministerio de Trabajo, el conflicto entre las fabricantes de neumáticos y el SUTNA, el sindicato del sector, tomó un nuevo giro con una reunión inesperada.
Alejandro Crespo, líder del gremio del neumático fue convocado a una cumbre con Julio Vitobello, el secretario general de la Presidencia y hombre de confianza de Alberto Fernández y Pablo Moyano, uno de los secretarios de la CGT y segundo del sindicato de Camioneros.
Moyano habría sido quien gestionó la cita, que se hizo en la sede del gremio de Camioneros. El líder sindical fue de los pocos que salieron a apoyar al SUTNA, en contraste con el resto de la conducción actual de la CGT, encabezada por Héctor Daer y Carlos Acuña.
Las medidas de fuerza del SUTNA, que hicieron que los tres fabricantes de neumáticos del país -Fate, Pirelli y Bridgestone- frenaran su producción, generó un efecto cascada en las automotrices. Ford y Toyota también debieron parar sus líneas y el resto de las terminales podrían seguir sus pasos en los próximos días si el conflicto se extiende.
El miércoles hubo reuniones por 10 horas en el ministerio de Trabajo, pero no se avanzó en ningún acuerdo. El ministro Claudio Moroni habló sucesivamente con las empresas y con el sindicato en el piso 18 de la sede de Alem, pero no pudo acercar a las partes para que el sindicato levante el paro y los bloqueos. Y la discusión iba a continuar este jueves.
Según trascendió, las compañías reiteraron un aumento del 16% en junio para totalizar 66% (2021-2022), una mejora de 2 puntos sobre una inflación del 64% en ese período.
El gremio, en tanto, propuso un aumento del 116% por 15 meses (desde julio de 2021 a septiembre de 2022), por encima de una inflación estimada del 101%, junto con un 35% por 9 meses (desde octubre de este año a junio próximo). Las firmas habían ofrecido un 38% entre julio de 2022 y marzo de 2023.
Crespo dijo este jueves temprano que el miércoles en realidad no hubo una negociación porque real porque hablaron con el ministerio de Trabajo en lugar de hacerlo con las empresas, “como corresponde“. Y agregó, sobre la propuesta: “Se mantuvieron sin mover nada, el 15% (entre julio y septiembre). Pusieron por escrito un 38% para la próxima paritaria, que claramente es insuficiente”.
Según el sindicalista, que viene del Partido Obrero, “es un dato objetivo que cualquiera puede ver y sirve como muestra de cómo quiere negociar la empresa o no negociar”.
Explicó que las compañías proponen abonar en julio un aumento del 15% para el tramo julio-septiembre, cuando “todo el mundo ve que ya julio y agosto tienen una inflación de 15% y, por lo tanto, cualquiera sea la inflación de septiembre (que se estima en 6%), el primer tramo ya está por debajo de la inflación”.
“Esto muestra claramente una forma de actuar de mala fe en la negociación, si empezamos con un tramo que ya está claramente por debajo de la inflación que ya se conoce”, sostuvo.
La propuesta es de un 15% en julio, un 12% en octubre y un 11% en diciembre, para completar el 38% en 9 meses.
De todos modos, primero deben ponerse de acuerdo sobre el cierre de la paritaria anterior (2021/22) para definir sobre qué base se harán los incrementos siguientes. Además, otro punto de conflicto es el valor de las horas extras, que el gremio pide que se paguen al 200%, lo que es rechazado por las empresas.