Poco a poco, el mundo está aprendiendo a “convivir con el coronavirus“. Una frase que se escuchó de boca de expertos de todo el mundo al inicio de 2020, cuando aún no había vacunas y no existían las variantes, ahora es menos utópica. Aunque suban los casos por Ómicron y la pandemia siga siendo, justamente, una pandemia.
Las restricciones cada vez son menos y también los protocolos, a la par de que más personas tuvieron contacto con el virus y, principalmente, de que las vacunas protegen contra la enfermedad grave.
El siguiente paso, al parecer, sería tratar al Covid de una forma más similar a lo que se hace con la gripe: sin contar cada caso, sin hacer pruebas ante el menor síntoma.
España ya lo planea, aunque todavía no hay una fecha para esta transición, que llegará tras la sexta ola. Dejará la notificación exhaustiva de casos y pasará a un sistema de vigilancia “centinela”.
El debate llegó acá, en medio del anuncio del Gobierno de que los contactos estrechos, asintomáticos no deben aislarse. ¿En Argentina el Covid ya es como una gripe?
La “gripecita”
Está claro que, como se llegó a especular en diciembre de 2019, cuando sólo “pegaba” en Wuhan y en el resto de China, el coronavirus nunca fue una “gripecita”. Ni por transmisibilidad, ni por consecuencias en el cuerpo. Y no lo es hoy ni lo será a corto plazo.
Testeos en el espacio Cultural Carlos Gardel de Chacarita. Foto Luciano Thieberger.
“Vamos camino a que sea una gripe, porque, por ejemplo, ahora en Argentina estamos viendo más de 100 mil u 80 mil casos, muy rápido, con muy breve período de incubación, los síntomas aparecen 1 o 2 días después del contacto, y la enorme mayoría son casos leves. Son raros los que requieran terapia intensiva. Veremos qué pasa con las nuevas variantes, a lo que hay que estar atentos, puede aparecer otra, pero da la impresión de que vamos hacia una enfermedad con mayor difusión y menor gravedad. Por eso se habla de ‘gripe'”, dice a Clarín Lautaro de Vedia, expresidente de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI).
¿Es lógico que en nuestro país se debata hoy tratar al Covid como a una enfermedad respiratoria estacional más?
Ahí De Vedia pone un punto. Sería una estrategia de manejo de la situación sanitaria, como pasa en España, pero que está muy lejos de esta tercera ola. Lo claro hoy, dice, es que así como la influenza no llena las terapias intensivas como el Covid lo hizo antes, el Covid tampoco las está llenando ahora. A futuro, cree, también caería acá la importancia de la notificación exhaustiva de casos.
“Sí están subiendo en las estadísticas los ingresos a terapia y eso se debe a que, con un mayor número de contagios, indefectiblemente también subirá el margen de quienes deban ser internados. La semana pasada eran 1.000 pacientes y ahora son 1.900. Pero tampoco ha subido tanto. En mayo, en la segunda ola, con 35 mil casos, había 7 mil pacientes en terapia, una ocupación del 20%, ahora, con esta cantidad de contagios, no se llega al 2%”, marca el infectólogo.
¿La mortalidad del Covid será en algún momento equiparable a la de la de la gripe? No.
“La mortalidad real por gripe es muy dificil de obtener porque, a diferencia del Covid, no es una enfermedad de denuncia obligatoria. No hay muchos datos sobre muerte por gripe. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estimó hace unos años que provocaba entre 300 y 600 mil muertos anuales“, cierra.
Según dijeron a Clarín desde el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, donde Ómicron ya es la variante mayoritaria, la tasa de mortalidad es del 2,1%. Desde la Ciudad comunicaron que la mortalidad está en 1,8%.
Rosa Reina, presidenta de la Sociedad Argentina de Infectología (SATI) aclara que no sería conveniente aportar por el momento la cifra de tasa de mortalidad nacional de esta tercera ola, porque llevaría a inexactitudes
“Necesitamos al menos 28 días para tener cifras reales (el tiempo que se requiere entre el contagio, la internación y la muerte). Con tan pocos pacientes que ingresan a terapia no se pueden sacar conclusiones, y los casos recién empezaron a aumentar hace 20 días”, describe Reina. En otras palabras, las muertes de los casos positivos reportados hoy se verán reflejadas recién el próximo mes.
El Covid como “la nueva gripe”
La nueva estrategia que adoptaría España frente al Covid es la que vienen utilizando con la gripe. “Chau” al conteo exhaustivo de casos, algo que las autoridades sanitarias consideran “insostenible” a largo plazo, “hola” a elegir un grupo de médicos, en combo con hospitales, para que funcionen como testigos o veedores del virus.
La idea es una crear una muestra, estadísticamente significativa y repartida en puntos clave, que permita calcular cómo se expande la enfermedad, todo mediante extrapolaciones.
“La reconversión del Covid hacia una gripe que quiere hacer España es más una expresión de deseo que una realidad“, sentencia Eduardo López, reconocido infectólogo del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez y asesor del Gobierno. ¿Por qué?
“Hoy por hoy, el coronavirus sigue siendo una pandemia. España tiene miles de casos. Compararlo con el virus de la influenza… El Covid tiene poco de estacional. En pleno verano nosotros estamos con una inmensa cantidad de casos. La idea de que se convierta en una endemia hoy no se vislumbra en lo inmediato. El mundo sigue teniendo miles de casos. Pero, probablemente, si aumentamos la vacunación, es posible que el virus no pueda variar más y se transforme en un virus endémico. Habrá que ver si se da una vacuna Covid anual, como la gripe, o si las vacunas de hoy duran un año o año y medio”, sigue López.
¿En qué momento la pandemia podría ser una endemia? “No lo sabemos. Todavía falta para que se convierta en algo estacional y centrado en una población. Hoy es incomparable con una gripe. Si estamos todos con tres dosis, más la inmunidad celular, el virus no puede reproducirse y generar otra variante de preocupación. Cuando suceda, se verá”. El promedio de casos de coronavirus, a nivel mundial, la última semana, llegó a 1.700.000 casos.
MG